Visión del mundo a través de los ojos del bebé

Cuando un niño nace todas sus funciones visuales están sin madurar. Algunas habilidades puramente visuales requieren para su completo desarrollo entre uno y dos años; mientras que otras habilidades perceptuales más complejas, requieren que las anteriores se hayan desarrollado correctamente y necesitarán unos cuantos años para que se desarrollen en su totalidad.

En la web TinyEyes de un profesor que conocí en la Universidad de Stanford, Bob Dougherty, podéis observar cómo se desarrolla la Agudeza Visual de un bebé desde su nacimiento hasta los 6 meses de vida.
Según el Departamento de Oftalmología y Ciencias Visuales de la Universidad de Illinois, la agudeza visual de un recién nacido es aproximadamente 20/400 (0.05%). Este valor va aumentando en los primeros meses rápidamente hasta los 2 años cuando la agudeza visual alcanza el valor del 20/20 (100%).
Realmente a los 9 meses ó 1 año el bebé ya alcanza una Agudeza Visual del 100% evaluados mediante potenciales visuales evocados, pero hasta los 6 -11 años no podemos obtener esta medida de forma subjetiva, es decir, mediante la observación de unas letras, signos o dibujos y gracias a la participación del niño.

Los recién nacidos no prestan mucha atención a su entorno visual, pero normalmente parpadean cuando se les apunta con una luz en sus ojos. A los 6-8 semanas el bebé ya fija su mirada en un objeto y sigue su movimiento.

• Es en este momento, a los 6 meses, cuando se le debe hacer al bebé una pequeña exploración visual, a modo de juego, para confirmar que todo se está desarrollando correctamente.

• A los 3 años se debe realizar al niño o la niña una evaluación completa para comprobar que sus bases visuales se han desarrollado con normalidad y que ninguna alteración visual le va a afectar a futuros aprendizajes.

• A los 6 años de nuevo, se le debe hacer una evaluación más completa para asegurarnos de que el niño o la niña está capacitado/a visual y perceptualmente para afrontar las demandas escolares.